Si has probado el tratamiento farmacológico y no te ha dado buenos resultados, o has sufrido efectos secundarios indeseables, tienes que leer este post porque vas a descubrir exactamente qué puedes hacer al respecto.
Pero antes, tenemos que revisar brevemente un tema que es central para enfrentar esta situación y que generalmente no es discutido fuera de la comunidad científica.
Los Psicofármacos NO son una “Cura” Para el TDAH
Se sabe, los medicamentos solo actúan de forma transitoria, alterando la disponibilidad de ciertos neurotransmisores (como por ejemplo la dopamina y la noradrenalina) en el cerebro…
Y esto puede mejorar la atención y otras funciones neuropsicológicas tanto en personas con TDAH como en personas sin TDAH. O sea, no se trata de un efecto específico para el TDAH (pero esta falta de especificidad es común en la mayoría de los medicamentos usados por la psiquiatría).
Como el efecto de los fármacos es transitorio, tienes que tomarlos de forma continuada para experimentar sus beneficios.
Por ello, deberíamos considerar los medicamentos más como un apoyo -MUY eficaz si tienes un poco de suerte- que como una solución definitiva.
Pero no todo el mundo tiene suerte con esto…
Los medicamentos no son igual de efectivos para todo el mundo
Según los estudios clínicos hay al menos un 30% de personas que no obtienen beneficios del tratamiento médico.
Además, hay quienes experimentan efectos secundarios indeseables… y hay personas para las cuales estos medicamentos están contraindicados porque presentan otras condiciones de salud mental que complican las cosas.
Se sabe, más de un 60% de adultos con TDAH presentan además alguna de estas condiciones:
- Depresión
- Ansiedad
- Bipolaridad (y otras alteraciones del ánimo)
- Trastornos de personalidad
- Adicciones
Esto, que en jerga médica se conoce como “comorbilidad”, complica el escenario porque los medicamentos para el TDAH pueden empeorar los síntomas de estas otras condiciones.
Esa puede ser la razón por la cual tu médico no te ha recetado medicamentos para el TDAH y, en cambio, solo te ha indicado medicamentos para tratar primero estas otras condiciones (por ejemplo un antidepresivo o un estabilizador del ánimo).
Finalmente, hay una razón que considero tan importante o más que las anteriores…
Muchas personas NO Quieren depender de un psicofármaco para poder funcionar adecuadamente por el resto de su vida.
No sé si es tu caso, pero un gran número de mis pacientes, suscriptores y alumnos me lo han dicho con estas mismas palabras, así que no me cabe la menor duda sobre esto.
Ahora, antes de seguir adelante, tengo que aclarar que mi posición no es “anti-medicamentos”. Por el contrario, tengo muchos pacientes que se benefician del tratamiento farmacológico y, cuando eso sucede, pues, qué bueno… enhorabuena… qué suerte
Bien, ahora te voy a decir cuáles son las opciones que tienes cuando los medicamentos no son la mejor opción para ti.
Alternativas que cuentan con apoyo en la evidencia científica sobre su eficacia
A la fecha se han realizado ya varios estudios científicos rigurosamente controlados que demuestran la eficacia de algunas alternativas no-farmacológicas para ayudar a los adultos con TDAH a superar los problemas que deben enfrentar diariamente.
Acá te voy a presentar 2 de las alternativas que conozco más de cerca y que cuentan con estudios publicados sobre su eficacia:
- Terapia Conductual y Cognitiva
- Entrenamiento Mental Basado en Mindfulness
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Terapia Conductual y Cognitiva (TCC)
Este es un tipo de terapia psicológica radicalmente distinto al estereotipo difundido por los medios y el cine.
Se trata de un trabajo colaborativo terapeuta-paciente que apunta a la solución de los problemas específicos que presenta el paciente.
Acá el foco no está en el pasado ni en buscar los orígenes de algún trauma psicológico en las profundidades del inconsciente, sino más bien en el presente…
…en los problemas actuales que la persona está enfrentando… y en buscar la forma más efectiva y rápida de solucionarlos.
En cuanto a su aplicación para el TDAH, la TCC usa estrategias y pautas concretas y prácticas:
- Técnicas de organización
- Manejo del tiempo
- Establecimiento de prioridades
- Solución de problemas
- Manejo de las distracciones
- Productividad
- Técnicas cognitivas de identificación y neutralización de pensamientos negativos
Los estudios publicados demuestran que este tipo de entrenamiento es SUMAMENTE útil para los adultos con TDAH…
Y la razón por la cual este enfoque funciona es muy simple:
Sabemos que en el TDAH casi siempre hay problemas con las llamadas “Funciones Ejecutivas” (FE).
Las FE son capacidades muy evolucionadas del cerebro humano…
Aquellas que nos permiten dirigir nuestra conducta hacia el logro de una meta…
(Es decir: las FE nos ayudan a hacer lo que sabemos que tenemos que hacer, en el momento oportuno y en el tiempo requerido para lograr nuestros objetivos).
Las FE dependen de los lóbulos frontales del cerebro y coordinan la actividad de muchas otras regiones que hacen posible funciones como:
- La atención
- La memoria de trabajo (memoria de corto plazo)
- El sentido y percepción del tiempo
- La capacidad de planificación
- La habilidad de solución de problemas
- La toma de decisiones
- etc…
La clave aquí es que puedes desarrollar estas habilidades con entrenamiento
Por eso es que las técnicas de la TCC son tan efectivas, porque permiten desarrollar estas habilidades que en los adultos con TDAH suelen estar bastante atrofiadas…
Ahora, es importante que tengas en cuenta que esto no es mágico, ni es algo que va a ocurrir de un día para otro…
Como cualquier otro entrenamiento, hace falta práctica y más práctica para conseguir resultados positivos perdurables.
¡Pero no te dejes desanimar por eso!
Los resultados valen la pena
Solo imagina por un momento la diferencia que podría hacer en tu vida si lograras controlar el CAOS del TDAH…
Si tuvieras un mejor manejo del tiempo, si nunca se te olvidara lo que tienes que hacer y si siempre supieras exactamente por dónde comenzar lo que tienes que hacer (dicho sea de paso: ninguna de estas habilidades te las van a enseñar los fármacos… o, como dicen mis amigos angloparlantes: pills don’t teach skills)
Y ahora vamos con la segunda opción…
2. Entrenamiento Mental Basado en Mindfulness
¿Qué puedo decir que no haya dicho ya en este blog sobre los beneficios de Mindfulness?
Bueno, lo primero que quiero subrayar es que acá estamos entrando de lleno en el ámbito de aquellos síntomas que son el principal target de los medicamentos para el TDAH.
¿Cómo así?
Fácil.
Cuando los medicamentos funcionan, algunos de sus efectos son:
- Mayor concentración y foco
- Mayor claridad mental
- Mejor control de la impulsividad
- Mayor energía y motivación para atacar proyectos complejos
- Mayor rapidez de procesamiento de la información
Todo ello es maravilloso, ¿no crees?
PERO, ¿qué pasa con quienes no pueden -o no quieren- tomar estos medicamentos?
Bueno, ahí es donde Mindfulness puede hacer toda la diferencia.
He aquí algunos de los beneficios de la práctica de Mindfulness:
- Mayor concentración y foco
- Mayor claridad mental
- Mejor control de la impulsividad
- Reducción del estrés
- Mayor equilibrio y regulación emocional
¿Notas algunos puntos en común con los efectos de los fármacos?
Pero eso no es lo mejor de todo…
Lo mejor es que diversos estudios con neuroimágenes han demostrado que la práctica de Mindfulness puede generar cambios reales en la estructura y la actividad de varias regiones cerebrales que tienen que ver con las funciones ejecutivas.
¿Qué te parece?
Por medio de un entrenamiento mental que apunta directamente a las funciones que se ven menoscabadas en el TDAH podemos fortalecer y desarrollar estas funciones… y, de paso, modificar nuestro cerebro para mejor en el proceso
Sí, puedes modificar tu cerebro de forma estratégica (es el fenómeno que la comunidad científica ha bautizado como NEUROPLASTICIDAD)
Por si fuera poco, la práctica de Mindfulness puede ayudarte a “desengancharte” de los pensamientos negativos, la autocrítica y la desmoralización que son tan frecuentes en los adultos con TDAH.
La razón es que este entrenamiento incluye aprender a observar la actividad de nuestra propia mente desde un lugar seguro, con cierta perspectiva y distancia, sin dejarnos arrastrar por nuestros pensamientos.
En fin, podría seguir escribiendo al respecto, pero voy a hacer algo mejor… algo que puede ayudarte a experimentar estos efectos por ti mismo/a.
En serio.
Si te interesa explorar la opción de usar Mindfulness como una herramienta natural para mejorar tu atención y lograr un mayor equilibrio emocional…
¡Aquí tengo algo que DE VERDAD te va a encantar!
He preparado una Guía de Mindfulness específicamente diseñada para adultos con TDAH.
Acá un breve resumen de lo que incluye:
- Cuáles son los beneficios de Mindfulness para los adultos con TDAH
- Por qué Mindfulness puede ser una excelente alternativa -o complemento- al tratamiento farmacológico
- Cómo puedes aprovechar el poder de la Neuroplasticidad cerebral para desarrollar tu potencial al máximo
- Cómo comenzar a practicar de forma rápida y sencilla
- Cuáles son los 5 pasos para entrenar y fortalecer tu atención a nivel neuropsicológico
Lo mejor es que no solo vas a aprender los conceptos fundamentales que necesitas para comenzar a practicar, sino que además…
Te voy a dar de regalo el MP3 con un ejercicio de Mindfulness de solo 8 minutos de duración
¿Qué te parece?
¿Suena bien?
¡Excelente!
HAZ CLICK AQUÍ para descargar el ejercicio.
Por mientras, déjame un comentario acá abajo para saber cuáles son tus preguntas e inquietudes sobre este tema.
¿Cuáles son los “síntomas” que los medicamentos no te han ayudado a reducir?
Malena says
Estoy tomando concerta 36 mg he mejorado notablemente mi impulsividad, mis actividades son más organizadas, pero aún olvido cosas comunes, sigo sintiendo que debo esforzarme más que las otras personas, olvido palabras y nombres en una conversación . Ojalá me ayude el Mindfulness.
Mario Mex says
muy buen artículo, te felicito por la inflamacionque compartes. no puedo bajar el mp3 de practica. Tienes algun link para bajarlo?. Gracias
Fernanda de México says
Hola tomo el concerta 36 mg; me ayuda para mi bruma mental, lo que me permite iniciar con labores (tareas o proyectos universitarios principalmente) mentales sin mayor esfuerzo, sin embargo me causan mucha fatiga, olvido palabras y siento que se me olvidan cosas, me elevan la temperatura en la tarde/noche y en las noches normalmente me ponen de muy mal humor. Si un día no la tomo me siento torpe y mucho más olvidadiza.
Tu artículo me trajo tranquilidad y tengo mucha esperanza en la guía de Mindfulness! ¡Muchas gracias!.